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En un comienzo, la palabra "Blogger" no me gustaba en lo absoluto ya que, mi otrora yo, pensaba que aquel calificativo era un sinónimo de nerd, de alguien aburrido y solitario. "Eso de ser bloggero no tiene nada de interesante. No levantas peladas con eso" solía decirle a la gente que me comentaba sobre los blogs y sus residentes y que al parecer en mi veían uno en potencia. Como imaginaran esos comentarios me desgastaban poco a poco. Finalmente lo intenté, escribí algo bastante cómico y sin sentido. Luego de haberlo publicado ocurrieron dos cosas: primero, sentí una ansiedad que no había sentido en ningún momento de mi vida, luego entendí que aquello era esa necesidad de ser leído, de que la gente te de su opinión acerca de tu post para llegar a un acuerdo y la sensación de realización que me llevó a lo segundo, seguir escribiendo. Mi memoria me falla en muchas cosas pero aun recuerdo que ese día subí 5 entradas y quería mas.

Hablando de recuerdos, tengo pocos sobre blogs que leí cuando comencé a escribir, allá por el 2009, de esos escasos recuerdos puedo encontrar a Sentir con Tinta y Batiduende, a Tofu the Traveler que siempre me inspiraba a las historias en prosa. Puede ser que mi aporte de ese entonces para la comunidad bloggera ecuatoriana haya sido mínima acaso escasa ya que jamás me gustó escribir sobre la sociedad o mis cosas. Fue por eso que me decidí por la ficción, algo de realismo mágico, algo para demoler los canones que nunca acepté.

Quizás esa rebeldía con lo preestablecido me ha llevado a formar parte del proyecto Libro Bloguero algo realmente maravilloso ya que es fantástico poder compartir ese deseo de ser escuchado con  otras personas que están ahora en el ruedo. Esto me lleva a pensar en lo que dijo Carlos Rossi: "Los locos abren los camino que más tarde recorren los sabios" ¿Y si todos en este proyecto estamos locos y queremos dejar nuestra huella para la posteridad? De ser así, sé que haremos un excelente trabajo. 

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