Tiempo Imaginario

"Alguien en el mundo piensa en mi"

La recordaré cantar aquella linea con una sonrisa en el semblante, con unos ojos que podría iluminar una carretera, con unos ademanes que no rayaban en lo exagerado. Si, la recordaré con un pantalón blanco y una blusa cafe con negro, un sombrero de plástico que le servirá de guarida para esconderse de la tempestad de afuera. Recordaré el sudor de la jarra sombre la mesa de vidrio, recordaré las rosas marchitas que caían pedazo a pedazo sobre el húmedo cristal. Cómo voy a olvidar esos muebles, tendrán un color mostaza que herirá los ojos, aquello se empeorará por las 3 bombillas de luz naranja que iluminaran la estancia. El cenicero tendrá dos colillas muertas, los vasos estarán frente a cada persona invitada, las guitarras, que marcarán el ritmo de la noche, pasarán de Charly a Fito y viceversa. Ella me mirará y desviará la mirada, yo intentaré sostenerla para crear un puente y saber que todo estaba bien. Creo que todo se dará cuando ella se levanté...

"La mirabas con cara de enamorado, todos nos dimos cuenta. Tenías algo... No sé, como un secreto, un guion que bailaba en tu mirada y no era respondido. Eran como destellos, si destellos, que iban y no venían y el resto solo podía ver.. ¿Qué más podíamos hacer? Se la notaba cómoda, tranquila y extremadamente relajada pero tú dabas la impresión de querer forzar algo. Ella fue al baño y al minuto tú también caminaste en esa misma dirección. Sabes bien como somos todos y cada uno de nosotros y, naturalmente, sabes los comentarios que soltamos ya que ella regresó rápido" me dirán.

Claro, recordaré, buscaré alguna excusa para hablar con ella pero no encontraré ninguna, mi boca temblará de miedo y una terrible impotencia me invadirá, no podré articular ninguna palabra así que me meteré a la cocina para esconderme de ella, no querré indisponerla y perder la oportunidad de verla de cerca y jugar a trazar lineas para unir sus lunares y ver que figura se formará. Al verla pasar mi corazón se detendrá unos pocos segundos para luego retomar su acelerada marcha. Cuando regrese a la sala nada habrá pasado.

"Cuando se despidieron, todos notamos que ella habría querido no volver a verte ni en esta vida ni en la otra vida de ser posible. Cuando bajamos, todos fuimos testigos de que algo en ella había cambiado, sus labios tenían una asombrosa curvatura, no dijo nada más en el trayecto" me confirmarán

Podrán decirme esto, lo cual creeré con certeza pero en realidad mis expectativas siempre van junto a la esperanza, que es la hermana menor del delirio.

"Se miraban con cara de enamorados, todos nos dimos cuenta. Compartían algo... como un secreto, un guion que bailaba en sus miradas. Eran como destellos, si destellos, que iban y venían y el resto solo podía ver.. ¿Qué más podíamos hacer? Se los notaba cómodos, tranquilos y extremadamente relajados. Daban la impresión de no querer forzar nada. Ella fue al baño y al minuto tú también caminaste en esa misma dirección. Sabes bien como somos todos y cada uno de nosotros y, naturalmente, sabes los comentarios que soltamos ya que se tomaron su tiempo." me dirán.

Claro, lo recordaré, nos tomaremos nuestro tiempo, nuestro tiempo en usar la boca y no hablar, no haremos ruido alguno. Usaremos ese tiempo para recorrernos y conocernos a través del tacto. Nos besaremos como si fuésemos indispensables el uno para el otro con una frenética pasión que nos hará temblar. Al fin el puente de nuestros ojos se conectará usando nuestros labios y las sensaciones y emociones irán y vendrán. El latir de nuestros corazones retumbará al unísono haciendo eco en el corredor, un eco profundo que quizás nos vaya a delatar pero nadie lo notará. Este momento durará unos pocos segundos ya que ella se separará de mi, volverá a besarme y se irá caminando por el pasillo. Cuando regrese a la sala nada habrá pasado entre los dos. ¡Qué buenos actores seremos!

"Cuando se despidieron, todos notamos que ella hubiera querido quedarse en tus brazos un rato más, una vida más de ser posible. Cuando bajamos, todos fuimos testigos de que algo en ella había cambiado, sus labios tenían una asombrosa curvatura, no dijo nada más en el trayecto" me confirmarán.

No la volví a ver debido a varios motivos que se escapaban de nuestras manos. Mi mente confunde aquellos recuerdos de la noche ya que la misma se rehúsa a creer en una sola realidad porque esta siempre será cambiante. Aún así, perderme (de nuevo) en esos labios hubiera sido lo más cercano que podría estar de las puertas del cielo.

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